El desconocer el origen de la cifra de ventas puede llevar a que los equipos de tienda no asuman la responsabilidad de los resultados que obtienen.

Este desempoderamiento y falta de responsabilidad es el origen de fuertes frustraciones y la crónica de una muerte anunciada para muchos propietarios de pequeños negocios y responsables de tienda.

Supongamos el caso concreto de una tienda que vendió el año anterior 3000€ y en el mimo día de este año ha vendido tan solo 2000€ esto representa una pérdida de 1000€ o lo que es lo mismo un 30% menos sobre la cifra del año anterior.

Respuestas a las cuestiones de nuestro negocio / tienda.

Ante la pregunta “¿Qué está pasando?” Las respuestas más habituales suelen ser (ajenas a la responsabilidad)

    • Es por la crisis, la gente no quiere gastar
    • Nos falta producto que el año pasado se vendía muy bien
    • Ha estado lloviendo y no había gente.
    • Había futbol en la tele
    • Etc.

Tomar una postura tan ajena a nuestra responsabilidad, no es buena alternativa, como decía Albert Einstein
“Si no eres parte del problema, difícilmente puedes ser parte de la solución”.

Efectivamente, es posible que todas las justificaciones o excusas que  se expresan puedan ser reales: puede haber llovido, estamos en crisis, y si hubo partido de fútbol, pero poco podemos hacer por variar toda esa serie de efectos, salvo resignarnos y sufrir.

ACCIONES EN TIENDA

Va a ser más efectivo, comenzar a plantearse qué acciones podemos llevar a cabo en nuestra tienda, y sí son responsabilidad nuestra.

Como por ejemplo:

    • Nuestros artículos /servicios están teniendo buena rotación
    • Nuestro equipo está teniendo una alta tasa de conversión
    • Se respira un buen clima/ambiente en nuestro local
    • Estamos reteniendo /aumentando nuestra cartera de clientes
    • Estamos reforzando/ comunicando la calidad de nuestra marca
    • Tenemos y seguimos una buena estrategia de posicionamiento?
    • Etc.

La diferencia de planteamiento, nos hace mucho más protagonistas de nuestras acciones y resultados en nuestra tienda. Si nos centramos en lo que si podemos hacer, somos parte activa de la solución.

Por el contrario, si nos centramos en aquellas variables que no podemos controlar (externas) aceptaremos resignados el resultado sin sentirnos partícipes de él.